En Katowice, Polonia, una nueva edición del encuentro que nuclea a casi 200 países hace foco especialmente en cumplir con el Acuerdo de París.
Este domingo se presentó la 24ª Conferencia de las Partes de la Convención sobre el Cambio Climático (COP24), en Katowice, Polonia. Con negociaciones y reflexión sobre el cambio climático, más de 28.000 personas participan del evento, entre representantes de las delegaciones de cada país, miembros de organizaciones no gubernamentales, trabajadores de los medios de comunicación, empleados y voluntarios. El encuentro se extenderá hasta el 14 de diciembre.
El foco principal está puesto en el cumplimiento de los compromisos establecidos en el Acuerdo de París, tres años atrás. En el último tiempo la ONU ha advertido que los niveles de gases de efecto invernadero en la atmósfera no están en los parámetros acordados, por lo cual, a este ritmo, se presume difícil alcanzar las cifras acordadas en París. El objetivo planteado era limitar el aumento de la temperatura global a menos de 2°C, procurando acercarse a 1,5°C a finales de siglo; sin embargo, las emisiones de gases han comenzado a aumentar después de un período de estabilidad, lo que impediría lograr tales metas. Es por eso que los 197 Estados que forman parte del Acuerdo deberán compartir opiniones y diagramar planes de acciones para asumir el desafío.
A lo largo de las dos semanas se realizarán distintos eventos, vinculados a diversas áreas: transporte, agua, suelo, energía, etc. En cuanto al financiamiento, se trabajará en el compromiso de que los países desarrollados brinden ayuda a los países en vías de desarrollo para que puedan llevar adelante políticas climáticas que combatan el calentamiento global.
Esta edición es una más de la lucha contra el cambio climático que los países han comenzado a llevar adelante hace décadas. En 1992 se realizó en Río de Janeiro la Cumbre de la Tierra, en la que se adoptó la Convención Marco sobre el Cambio Climático. Desde que ésta fue suscrita por los países (197, al día de hoy), se celebra cada año una conferencia de las partes para continuar el camino planteado.
Para ajustar las medidas estipuladas y demarcar con mayor precisión los objetivos, a la mencionada Convención fueron sumándose nuevos tratados. Entre ellos, se destaca el Protocolo de Kyoto, del año 1997, y el Acuerdo de París, del año 2015. Los compromisos asumidos en éste último están hoy en riesgo, por lo que su discusión se ha revelado como una tarea urgente para todos los gobiernos.
Fuente: https://news.un.org/es/
