El evento mundial tuvo su inicio ayer en la ciudad de Glasgow.

Desde el 31 de octubre al 12 de noviembre se estará desarrollando en Glasgow, Escocia, la vigésimo sexta edición del evento creado para reflexionar y fijar puntos de acción que permitan dar respuesta a los principales problemas climáticos que enfrenta el planeta.

El encuentro tiene su origen en 1992, cuando en la Cumbre de la Tierra organizada por la ONU en Río de Janeiro se adoptó la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático. Este tratado, que buscaba estabilizar las concentraciones de gases de efecto invernadero en la atmósfera y que hoy cuenta con 197 países signatarios, entró en vigencia en 1994, y en 1995, en Berlín, tuvo lugar la primera “Conferencia de las Partes”. Este año llega la edición n° 26 del evento, tras la imposibilidad de realizarlo en 2020 por la pandemia.

Cada año los países participantes evalúan medidas de acción y amplían acuerdos. En 1997, por ejemplo, se firmó el Protocolo de Kyoto, que estableció límites para las emisiones de los países desarrollados hacia 2012. Y en 2015 se destaca la adopción del Acuerdo de París, con el compromiso de las naciones para limitar el aumento de la temperatura global a 1,5° C. Una cifra que aún no se logra alcanzar, por lo que la COP26 se revela fundamental para finalmente cumplir la meta de reducir el calentamiento global, con acciones concretas que no queden solo en intenciones.

En el inicio del evento, Chile hizo entrega oficial de la presidencia de la Conferencia, tras haberla liderado en su edición anterior. En su discurso, la ministra del Medio Ambiente, Carolina Schmidt, señaló que la presidencia permitió alcanzar consensos e impulsar también a nivel nacional la estrategia para combatir el cambio climático, destacando iniciativas como la Alianza de Ambición Climática por la carbono neutralidad.

Durante dos semanas, la COP26 contará tanto con negociaciones técnicas como con reuniones entre los principales mandatarios de cada país. Además, en el pabellón del evento se organizarán diversos eventos paralelos abiertos al público, con exposiciones y charlas centradas en temáticas como energías, ciencia e innovación, transporte y ciudades sustentables.

Desde la organización se plantearon cuatro objetivos principales:

  • Asegurar las cero emisiones en todo el mundo para mediados de siglo y mantener los 1,5° C: tomar medidas que garanticen la eliminación gradual del carbón, el freno a la deforestación y el impulso a economías más sustentables.
  • Adaptarse más para proteger a las comunidades y los hábitats naturales: trabajar por la restauración de los ecosistemas y por sistemas e infraestructura que protejan a las comunidades.
  • Movilizar la financiación climática: que las naciones más ricas ayuden económicamente a las menos desarrolladas, una promesa planteada hace tiempo pero aún incumplida.
  • Trabajar juntos para conseguirlo: potenciar la colaboración entre gobiernos, empresas y sociedad civil, con miras a que el Acuerdo de París sea finalmente operativo.

Serán, en síntesis, dos semanas fundamentales para lograr acuerdos, para plantear objetivos realistas y alcanzables, para trabajar en conjunto y unir voluntades que permitan desarrollar acciones concretas que mitiguen el cambio climático y protejan nuestro planeta.


Fuente: ONU