En época de vacaciones, ser conscientes del problema de los residuos en verano es vital para cuidar el ambiente.
En estos meses, las costas chilenas no son únicamente foco de turismo y disfrute: también lo son de un alto volumen de residuos. Sea por estar en un lugar diferente, por modificar la rutina diaria, por los traslados o por la falta de infraestructura, los hábitos de reciclaje pueden relajarse cuando viajamos. Y las cifras reflejan esa tendencia.
Según el Ministerio del Medio Ambiente, en base a datos de 2021, se registraron en el país más de 1,7 millones de toneladas de residuos en verano vertidos en playas y océanos. Gran parte de ellos no son arrojados directamente en el agua: según el Museo de Historia Natural de Valparaíso, el 60% de los residuos producidos en tierra son arrastrados por lluvias y ríos hacia el mar.

Llevar tus propios contenedores es clave para promover el reciclaje.
Un estudio elaborado por Científicos por la Basura, programa de ciencia participativa de la Universidad Católica del Norte que investiga el problema de la basura en el medio ambiente, indica que el principal residuo hallado en las playas chilenas son las botellas, con un 34,6%. En segundo y tercer lugar aparecen los vidrios (22,4%) y las colillas de cigarro (20%). Además, el programa destaca la problemática de los microplásticos, pequeñas partículas surgidas de la descomposición de dicho material que son ingeridas por la fauna marina, poniendo su vida en peligro e, incluso, llegando a los alimentos que comemos.
Todo esto hace necesario implementar distintas estrategias que permitan mitigar el impacto ambiental de los residuos en verano en las zonas costeras:
- Llevar nuestra propia bolsa reutilizable para recoger los desechos que generamos y luego depositarlos en los contenedores adecuados.
- Localizar los puntos limpios más cercanos en la zona.
- Usar envases reutilizables (botellas, cubiertos, etc.).
- Evitar fumar en la playa.
- Transmitir estas buenas prácticas a las demás personas.
Contar con espacios naturales cuidados y libres de residuos en verano es imprescindible para reducir la contaminación en playas y océanos. Por eso, junto al equipaje y al deseo de disfrute, debemos llevar también los hábitos del reciclaje.